Últimamente me da la impresión de que el hecho de
ser padre no se toma tan en serio y no se le da la importancia que se le debería. Y no hablo solo de Ana Obregón, hablo en general.
Ser padre es la responsabilidad máxima que recae sobre un ser humano, y me da a mi que esa responsabilidad está siendo opacada por el egoísmo. Un hijo es como una vasija vacía, y el deber de los padres es llenar esta vasija con respeto, buenos valores y responsabilidad. Unos padres que no se preocupan por su hijo están condenando una vida desde el momento en el que es concebida.
Cada vez más, empiezo a pensar que se tendría que hacer algún tipo de test para determinar si una pareja puede encargarse de criar una criatura, y sí, sé que suena distópico y sacado directamente de un capítulo de Black Mirror, ¿pero qué otra forma tenemos de saber si ese niño o niña va a vivir un infierno?
El mayor exponente de estos padres egoístas ( entrando ya más en profundidad en el tema de la foto) son los famosos. Estos ya no se tienen que preocupar siquiera del embarazo ¿para qué pasar por todo eso que a la larga hará empeorar mi imagen estética solo porque quiero un crío, verdad? Que lo haga otra mujer en mi lugar y listo, deben pensar, y es algo que me parece repulsivo.
Si quieres ser padre por motivos egoístas hazte un favor a ti mismo y sobre todo a esa pobre criatura y no lo seas. Un padre le debe todo a sus hijos, y no al revés, y eso es algo que cada vez más gente necesita aprender.
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CORAZÓN ACTUADO Irene Guerrero Olmeda
Nadie puede negar que de vez en cuando ve el corazón, ya sea por la tele, la radio o el móvil, pero este, cada vez más, se está volviendo más tóxico y actuado.
Lo típico que vas a casa de tus abuelos a merendar y están viendo Sálvame, o por la noche, ven Supervivientes, GH, o programas de este tipo, que al final te enganchan y mucha gente los sigue, donde aparecen supuestos colaboradores, dando su opinión sobre un tema del que normalmente no se han informado previamente y hablan sin saber muchas veces faltándose al respeto entre ellos y molestando a gente externa.
Y al final, a este tipo de personajes somos la sociedad quienes los construimos, la gente que les da audiencia.
Hay que tener cuidado a quien les damos fama y poder, para que no pase como con Ana Obregón, de una excelente actriz de los años 80 a un personaje del corazón, sobreactuado y exagerado hasta el punto de su última aparición, saliendo en silla de ruedas con una bebé en brazos después de ser abuela o madre. Pero esto no es lo grave, sino que esta niña es por gestación subrogada, es decir, el cuerpo de la actriz no ha sido sometido a ningún parto como para que deba salir en la silla. ¿Será esta aparición una forma para volver a aparecer más reiteradamente en los medios de comunicación? Son muchas las preguntas que se han planteado al respecto, pero igualmente suena sospechoso que hasta los fotógrafos la esperaran.
Al final, somos nosotros los que vemos la tele y los medios de comunicación y somos nosotros quien creamos a los personajes. Pero hay que tener cuidado de no “crear” a ciertas personas y que sea un error y que salgan rana.
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LOS NO DERECHOS DE LAS MUJERES
Durante muchos años las mujeres han ocupado un segundo puesto en la sociedad, siempre se han encontrado muy por detrás de los hombres. En la actualidad, después de mucho esfuerzo y gracias a todas las manifestaciones se ha conseguido realizar un gran cambio, pero ¿a cambio de qué?, ¿qué precio ha costado el cambio recibido de la sociedad?
El pasado septiembre, la iraní Masha Amini decidió salir a la calle para manifestarse, pues en Irán las mujeres siguen igual que hace muchos siglos, sin derechos y debiendo cumplir entre otras cosas el reglamento de vestimenta, pues deben tapar su cabello con un velo conocido como hijab. La joven iraní, como manera de reivindicarse, este acto las autoridades comenzaron una serie de agresiones contra ella, que acabaron con la muerte de la joven días después del altercado.
Tras su muerte han sido muchos los famosos que han comenzado a visibilizar más este grave problema, al igual que en los programas informativos. Pues siempre se ha sufrido gravemente en países donde el hombre está por encima de la mujer pero como en nuestro país este problema no está vigente en gran medida, no lo tomamos en cuenta.
Debemos reflexionar más, tanto a nivel personal como a nivel social y darnos cuenta de cómo se encuentra la sociedad en la que vivimos para que no ocurran más desgracias como estas y sobre todo para que podamos gozar de los mismos privilegios independientemente de nuestro sexo o país de procedencia.
